Simulacros de emergencias: todo lo que debes saber

En el siguiente artículo del blog hablamos de los simulacros de emergencia, una práctica imprescindible para las empresas y trabajadores, cuyo objetivo principal es la detección de posibles puntos débiles en el plan de emergencia de una organización.

Los simulacros en empresas buscan familiarizar a los empleados con los procedimientos de acción en caso de una situación de emergencia particular, teniendo en cuenta las características físicas y ambientales específicas de cada lugar de trabajo.

Este tipo de protocolos son muy útiles para adquirir buenos hábitos y un ambiente laboral seguro. 

Plan de Emergencia

Es importante diferenciar los simulacros del plan de emergencia, el cual es un conjunto de procedimientos y medidas, diseñadas de antemano, para hacer frente a situaciones de emergencia. En los mismos se establecen las acciones a seguir, los roles y responsabilidades de las personas involucradas, los recursos disponibles y la coordinación necesaria para mitigar los riesgos y proteger la seguridad en el trabajo

Por otro lado, un simulacro de emergencia es una actividad práctica que se lleva a cabo para poner a prueba y evaluar la efectividad de dicho plan de emergencia.

Objetivos principales de los simulacros

A continuación, exponemos algunos de los objetivos del simulacro de emergencia:

  • Verificar la efectividad de los procedimientos de actuación.
  • Evaluar y mejorar la comunicación entre los Equipos de Emergencia.
  • Establecer una estructura jerárquica clara durante la emergencia, identificando a todos los participantes: las personas, equipos e instituciones externas involucradas.
  • Detectar errores u omisiones en el Plan de Autoprotección.
  • Fomentar una cultura de prevención y conciencia en materia de seguridad.
  • Evaluar la suficiencia y adecuación de los medios y recursos asignados para hacer frente a la emergencia.

Fases de un simulacro de emergencia

Cada simulacro puede variar en función de las características y necesidades específicas de cada lugar o situación de emergencia. Pero, por norma general, estas son las fases del mismo:

1. Planificación

Se debe organizar una reunión previa para discutir y establecer algunos detalles del simulacro como el alcance, la participación y las características específicas del edificio o lugar. Además, se debe seguir un guion básico que indique una secuencia de acciones a seguir, sin necesidad de especificar todos los detalles.

Y, por último, proporcionar a los equipos de emergencia involucrados información sobre las pautas de actuación según los recursos disponibles.

2. Ejecución

En esta fase, se ponen en práctica las acciones acordadas en la reunión de la fase de planificación, distinguiendo varias etapas:

  • Alerta: consiste en emitir una señal o aviso rápido que ponga en marcha al personal responsable de la primera intervención.
  • Alarma y evacuación: el personal que no tiene una función específica, debe evacuar el edificio al escuchar la alarma y reunirse en un punto de encuentro predeterminado. El abandono del espacio designado debe realizarse de manera ordenada y segura, sin correr. Se realiza un recuento de los evacuados por los responsables asignados con este rol.

  • Intervención: El personal designado actúa para controlar y mitigar la situación de emergencia de manera eficaz.

3. Informe

Por último, se elabora un informe detallado que incluya las conclusiones del simulacro de emergencia. En el mismo, se identifican y proponen mejoras, basadas en los resultados y las lecciones aprendidas durante el ejercicio práctico del simulacro. 

Finalmente, se emite un certificado que acredita la realización exitosa, o no, del simulacro.

Periodicidad de realización del simulacro

De  acuerdo a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales art. 20, los simulacros de emergencia se deben realizar de forma periódica, al menos una vez al año.  El RD 393/2007, norma básica de autoprotección, indica que se han de realizar simulacros de emergencia según lo establecido en el plan.

Sin embargo se pueden planificar con mayor asiduidad, dependiendo de las circunstancias del entorno laboral. 

Factores que pueden causar una emergencia

Por último, y no menos importante, mencionamos algunas de las situaciones que pueden desencadenar una emergencia en el entorno laboral. Es importante conocerlas para aumentar las probabilidades de evitarlas. 

Clasificamos los factores de la siguiente manera. 

Fallos humanos

  • Error humano en el manejo de maquinaria o equipos.
  • Desconocimiento de los procedimientos de seguridad por parte del personal.
  • Falta de capacitación adecuada en medidas de prevención y actuación.

Fallos técnicos

  • Fallas en el sistema eléctrico que pueden provocar cortocircuitos o incendios.
  • Mal funcionamiento de equipos de seguridad, como extintores o sistemas de alarma.
  • Defectos en la infraestructura que pueden causar filtraciones de gas o fugas de sustancias peligrosas.

Defectos en el diseño de las instalaciones o uso inadecuado de las mismas

  • Diseño deficiente de salidas de emergencia, lo cual dificulta la evacuación.
  • Utilización incorrecta de equipos de protección personal.
  • Inadecuada gestión de sustancias químicas o materiales inflamables.

Catástrofes naturales

  • Terremotos que puedan generar colapsos estructurales y deslizamientos de tierra.
  • Inundaciones que afecten a las instalaciones y pongan en riesgo la seguridad de las personas.
  • Tormentas severas que causen daños en infraestructuras y cortes de energía.

Origen externo

  • Incendios en instalaciones vecinas que se propagan y amenazan la seguridad del entorno.
  • Atentados terroristas que afectan a edificios y áreas públicas.
  • Accidentes en transporte de materiales peligrosos que impactan en el área circundante.

 

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Si necesitas más información sobre el plan de emergencia y los simulacros, tenemos un equipo a tu disposición para orientarte

¡Te esperamos en el próximo artículo!